

Todo lo que debemos saber sobre el envejecimiento capilar
Hoy en día estamos muy concienciados sobre el envejecimiento cutáneo. Pero, ¿qué sucede con el envejecimiento capilar? Yolanda Izquierdo, Hair Expert de Montibello, nos explica cómo afectan al cabello la edad y otros factores, y qué podemos hacer para hacer frente a este proceso natural y lucir un cabello más sano y joven por más tiempo.
¿Qué es el envejecimiento capilar?
Al igual que la piel, el cabello también sufre el proceso del envejecimiento capilar. La edad se convierte en el factor principal, pero también existen otras causas importantes que influyen en el deterioro de nuestro cabello, como pueden ser: los trastornos hormonales en la etapa de la adolescencia y la menopausia. También influyen nuestro estilo de vida, la alimentación y el estrés. Y, por supuesto, la forma en la que cuidamos y tratamos nuestro cabello.
¿En qué consiste?
Vamos a desgranar los principales factores que influyen en el envejecimiento capilar:
- La edad: igual que en la piel se producen ciertas alteraciones, como las arrugas o la flacidez, la edad también pasa factura a nuestro cabello. Los principales signos que revelan el paso de los años son: un cabello más fino, con menos cantidad e, incluso, con cambios de pigmentación, que se traducen en la aparición de las primeras canas.
- Trastornos hormonales: en las etapas de cambios hormonales importantes se producen alteraciones en el cabello. En la adolescencia, cuando la regeneración celular y los cambios hormonales están más acelerados, podemos percibir en el cabello un exceso de sebo o hiperhidrosis en el cuero cabelludo, lo que da lugar a un cabello más graso. También en esta etapa puede alterarse la estructura de nuestro cabello, así como su forma. Así, es frecuente que se vuelva liso o rizado, y con más encrespamiento. En la etapa de la menopausia, en cambio, sucede todo lo contrario: al disminuir el riego sanguíneo, el cabello se nutre más débilmente, con lo que el cabello se presenta más fino y débil, además de con menor cantidad porque, en esta etapa, se incrementa también la caída. Otro cambio que se produce durante la menopausia es el incremento de canas.
- Estilo de vida: el estrés, la alimentación, beber suficiente agua y el dormir lo necesario son factores que alteran y aceleran el envejecimiento capilar.
- Los cuidados capilares: es importantísimo mantener el buen estado y la salud del cabello. Deberemos proporcionarle los cuidados adecuados escogiendo el champú, el acondicionador, la mascarilla y los productos de acabado más adecuados. Para ello, nada mejor que dejarse asesorar por un profesional del cabello acudiendo a un salón de peluquería. Nadie mejor que un profesional para recomendar los productos específicos para cada necesidad. También es importante evitar el uso abusivo de fuentes de calor (planchas, secadores) y proteger el cabello con un producto adecuado antes de su aplicación. Y, por supuesto, proteger siempre el cabello en verano con protectores capilares, ya que el sol también favorece su deterioro y envejecimiento.
¿A qué edad se manifiesta y qué síntomas aparecen?
Los cambios más significativos del envejecimiento capilar se producen a partir de los 40 años, cuando el cabello empieza a recibir menos nutrientes y se empieza a acelerar la oxidación celular. Estos factores se traducen en un cabello más fino, con menos cantidad, volumen y densidad. Y es en este momento cuando se incrementa también la aparición de canas.
También a nivel estructural se producen alteraciones y es en esta década cuando empezaremos a percibir una pérdida de brillo y un cabello más liso o encrespado, al estar más debilitado.
¿Guarda alguna relación con el envejecimiento de la piel?
Totalmente. Aunque no hay todavía demasiada concienciación en lo que al envejecimiento capilar se refiere, al contrario de lo que sucede con el envejecimiento de la piel, del que estamos muy pendientes. Pero, como hemos comentado, al igual que la piel, el cabello también pierde elasticidad y se vuelve más rígido y débil.
Aunque no podemos luchar contra el paso del tiempo, la buena noticia es que, hoy en día, podemos retrasar los signos del envejecimiento en nuestro cabello con una buena rutina de cuidado capilar, del mismo modo que hacemos con nuestra piel.
¿Qué se puede hacer para combatirlo?
Lo principal: seguir un estilo de vida saludable, que incluya una dieta mediterránea, rica y variada, que incluya legumbres, cereales, proteínas…. Estos alimentos nos aportan las vitaminas y oligoelementos necesarios para mantener nuestro cabello fuerte y sano.
Por otro lado, es clave también una rutina capilar adecuada a nuestras necesidades específica, a ser posible, con ingredientes naturales.
Yo recomiendo la gama Hop de Montibello, vegana y con hasta un 97% de ingredientes de origen natural. Esta gama basa su eficacia en la biociencia de las algas multiplicando los resultados y combatiendo eficazmente los 8 signos del envejecimiento capilar: hidratación, nutrición, equilibrio, fuerza, protección del color, encrespamiento, volumen y brillo. En función de las necesidades de cada tipo de cabello, escogeremos la gama más adecuada.
En su fórmula encontramos potentes activos antiedad utilizados en el skincare como:
- Péptidos y aminoácidos: rellenan el córtex fortalecen el cabello.
- Antioxidantes: combaten agresiones externas y radicales libres.
- Nutrientes: energizan y revitalizan los folículos (raíz del cabello) para un crecimiento fuerte y saludable.
- Lípidos esenciales: restauran la fibra, aportan elasticidad y reequilibran el cuero cabelludo.
Con un cuidado capilar constante con productos profesionales lograremos mantener la vitalidad y juventud de nuestro cabello durante mucho más tiempo.
